París, tierra de contrastes…

Ayer caminé por el barrio de Saint Michel.

Una cantidad impresionante de camiones de la policia permanecía en los carriles de autobuses con una misión precisa: impedir que los hijos de Don Quijote instalen un nuevo campamento al pie de Notre Dame.

Mientras tanto, en los almacenes, la gente celebraba el ritual consumista navideño, buscando ideas, comprando regalos, gastando un promedio de 556€ por unidad familiar.

Y en la prensa te dicen que aumenta la precariedad y que baja el poder adquisitivo…

¡Tengo que repasar urgentemente mis clases de estadísticas!

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